La Comunicación ha cambiado, amigo Sancho.
https://grisoalex.files.wordpress.com |
--Presta atención,
Sancho, amigo, porque donde una puerta se cierra, otra se abre y aunque bien sé
que no hay hechizos en el mundo que puedan mover y forzar la voluntad, que es
libre nuestro albedrío, vengo a encomendarte una industria que escapa a mis
conocimientos.
Recoge presto esas
máquinas infernales que usas y lanza a los cuatro vientos mensajes a mi amada
Dulcinea. Porfía en ello con tuits y retuits. No desfallezcas en llenar de
likes cualesquiera de sus ocurrencias sin par. Haz fotos de mi galanura a lomos
de Rocinante, con yelmo y armadura, para
embelesarla en Instagram… y envíale un whatsapp que diga: "¡Oh señora de
la fermosura, esfuerzo y vigor del debilitado corazón mío! Ahora es tiempo que
vuelvas los ojos de tu grandeza a este tu cautivo caballero, que
tamaña aventura está atendiendo"… y no olvides el aderezo de los más
graciosos emoticonos que en el mundo existan.
Siempre he pensado
que sería un interesante ejercicio de imaginación y creatividad poner en manos
de Don Quijote y Sancho la tecnología que hoy tenemos para comunicarnos y
colocar sus aventuras en un mundo digitalizado. Veo un Don Quijote con aires de
hipster de la Triste Figura
venido a menos; a Sancho como un proyecto de hacker, adicto a la Tor y a eBay, y a Dulcinea como una millennial pegada a una
pantalla, que terminaría, sin duda, por ignorar las constantes llamadas por
Skype del Ingenioso Hidalgo y por bloquear al de La Mancha en las redes sociales.
Lo cierto es que las
andanzas de nuestro personaje más universal, siendo las mismas, parecerían
otras y Cervantes quizá pasaría a deber su fama a su actividad como Youtuber
o bloguero.
Mucho ha cambiado la
comunicación, no ya en siglos sino en apenas un par de décadas, y no tanto en
el objetivo que es su razón de ser sino en los procesos que permiten al mensaje
hacer su recorrido de emisor a receptor. Hoy adquiere especial significado
la famosa afirmación de McLuhan "el medio es el
mensaje"
y las siguientes características de la comunicación actual que me permito
resaltar, si bien no son las únicas, creo que ilustran bien los cambios y el
protagonismo del soporte, situado ya a la misma altura que el mismo contenido.
Cuando "leer
entre líneas" forma parte del mensaje.
La expresión
tradicionalmente se ha usado para manifestar la necesidad de intuir o
vislumbrar la intencionalidad del emisor, no dicha expresamente, pero sí
presente en el contenido. Hoy, sin embargo, la lectura "entre líneas"
es una realidad con un nombre bastante descriptivo: HIPERTEXTO.
http://hipertexto.wikidot.com/hipertexto-e-educacao |
La comunicación ahora
es un tronco que no se entiende sin sus ramas. Los enlaces a otros contenidos
complementarios que podemos añadir, sin mostrar, a cualquier elemento (texto,
imagen…) puede enriquecer el mensaje hasta límites casi infinitos. Esta
ramificación por un lado permite ahorrar digresiones en el mensaje principal,
sin renunciar a completarlo, y ofrecer al destinatario un contenido mucho más
completo. Dicho en términos simples, el hipertexto equivale a las notas a pie
de página impresa pero sin límites de espacio ni de formato. La lectura de
un texto sobre una pantalla, por tanto, ya no es lineal sino fragmentada
porque, a golpe de clic, llegamos a otros contenidos que van engrosando el
mensaje de partida. Además, el hecho de que los hipervínculos destaquen en un
color diferente provoca, como en unos apuntes con subrayados, una lectura
selectiva. Una de las consecuencias de esta forma hipertextual de componer el
mensaje es que, en mi opinión, se tiende a sacrificar la argumentación para
priorizar el dato, que puede crecer de forma exponencial a partir de los
vínculos incorporados.
Quieras o no,
"te vas a enterar"
La palabra mágica es
"compartir". Cada vez parece tener menos sentido hablarle a
"alguien", así en singular. Ahora, ironías de la tecnología, la
virtud cristiana de dar al que no tiene viene por defecto en cualquier
contenido al que accedamos en internet y debemos incorporarla, casi por
obligación, a los que nosotros mismos creemos. Solo el email es, de partida,
one to one, aunque también contamos con la posibilidad de incluir Copia a otros
destinatarios, e incluso con la de enviar Copias Ocultas a destinatarios no
confesables, algo que siempre tuvo para mí un cierto halo de traición.
http://www.adweek.com/ |
El paradigma de la
comunicación compartida son las Redes Sociales. Su sentido está en tener
"amigos", crear "grupos", acumular seguidores, conseguir
que tus mensajes se difundan… y todo aquello que sirva para hacer bueno el
concepto de "red", es decir, de participación colectiva. La
privacidad está casi dejando de ser un valor, para convertirse en algo innecesario
o al menos prescindible; al contrario, el éxito está en que tú y todo lo
tuyo se conozca y comente. Y eso, como era de esperar, también tiene
consecuencias no deseadas; algunas, por ejemplo, las encontramos con frecuencia
en la sección de sucesos de los periódicos y en las oficinas donde se
desarrollan procesos de selección laboral. Ocurre cuando compartir se convierte
en desperdigar y nuestra vida pasar a forma parte de un escaparate tan
sugerente como, a veces, impúdico.
Ya nos veremos,…
seguro.
El tercer rasgo de la
comunicación en nuestros días es la multipantalla para un medio único. La
prensa, la radio, la TV, el correo, los libros, la música, la fotografía…, en
fin, los medios que el ser humano ha ido desarrollando y usando para
comunicarse confluyen, de forma cada vez más abundante e indiscutible, en uno
solo: el medio digital. La comunicación off line es mucho más limitada, en
tiempo y espacio, que la comunicación on line. Por eso los contenidos deben
transmitirse ya con la inmediatez y el alcance que internet nos ofrece.
Este único medio de
confluencia, a su vez, se nos ofrece en multipantalla. El móvil, la tablet, el
ordenador y las abundantes pantallas que el internet de las cosas van
desperdigando por nuestra vida (desde el coche al frigorífico) son nuestro
permanente foco de atención. El 21% de los jóvenes está en riesgo de ser adicto a las
nuevas tecnologías, las consultas de los fisioterapeutas se llenan de personas con
problemas
cervicales por el tiempo que pasan inclinados sobre las pantallas, los pulgares
de los jóvenes son ya más musculosos por el uso superior que hacen de ellos
para escribir mensajes en las pantallas… La misma naturaleza, en fin, la
conocemos más por la fotografía que nos sirve de salvapantallas que por el
tiempo que dedicamos a disfrutarla "en directo".
¿El medio es hoy el
mensaje? Y si no lo es, Mr. McLuhan, estamos muy cerca.
El conocido aforismo de Marshall McLuhan “el medio es el mensaje” es el título del primer capítulo de su estudio más influyente, Understanding Media: The Extensions of Man, publicado por primera vez en 1964. El Profesor de la Univ. de Nueva York Lance Strate sostiene que al decir que “el medio es el mensaje”, McLuhan estaba resaltando que tenemos la tendencia de prestar atención al contenido y a ignorar el medio, pero es el medio el que juega un papel más significativo, el que tiene un efecto mayor. Hoy día quizá podamos ver de manera más clara que es la interconectividad que permite internet lo que tiene relevancia especial, y no un tuit en particular o el nuevo post que alguien colgó a la hora de comer, o un tutorial en You Tube o una página web para comprar un producto u otro.
El conocido aforismo de Marshall McLuhan “el medio es el mensaje” es el título del primer capítulo de su estudio más influyente, Understanding Media: The Extensions of Man, publicado por primera vez en 1964. El Profesor de la Univ. de Nueva York Lance Strate sostiene que al decir que “el medio es el mensaje”, McLuhan estaba resaltando que tenemos la tendencia de prestar atención al contenido y a ignorar el medio, pero es el medio el que juega un papel más significativo, el que tiene un efecto mayor. Hoy día quizá podamos ver de manera más clara que es la interconectividad que permite internet lo que tiene relevancia especial, y no un tuit en particular o el nuevo post que alguien colgó a la hora de comer, o un tutorial en You Tube o una página web para comprar un producto u otro.
Creo que el "always
on" (siempre conectados), que ahora conduce nuestro día a día, está
pasando a ser un valor superior a los mismos mensajes y contenidos. Incluso el
silencio exige hoy ser un silencio "on line".
La nomofobia es la respuesta a
una patología contemplada entre las adicciones como es la dependencia limitante
y enfermiza con el teléfono móvil. Quien la padece tiene terror más a no disponer
del dispositivo al alcance de su mano que a perderse los últimos whatsapps o
tuits de sus contactos. El medio adquiere pues connotaciones de mensaje en sí
mismo. Los soportes digitales son más que vehículos para transmitir
información; son parte de nuestra identidad. No tengo nada que decirte
pero poseo todas las pantallas posibles para hacerlo…, y con eso te lo digo
todo.
Comentarios
Publicar un comentario